domingo, 28 de febrero de 2010

Juguetes Seguros

Aunque haya pasado la temporada "fuerte" de compra de juguetes para regalar, en todo el año tenemos cumpleaños o la cercana fecha del día del niño. Es por ello que nos dimos a la tarea de investigar acerca de las medidas básicas necesarias a la hora de escoger un juguete para que éste sea seguro y adecuado para el niño que lo recibirá. Así, en revistadelconsumidor.gob.mx se encontró un artículo que lo explica de forma muy concreta:

Aunque la normatividad mexicana oblica a los proveedores a indicar las características del juguete y al no uso de elementos de riesgo, es necesario que use su criterio cuando adquiera los juguetes que sus hijos disfrutarán:

1. Uno de los riesgos importantes en juguetes es que sus tintas y pinturas contienen elementos tóxicos, como el plomo y el cromo, que si son ingeridos por los niños pueden provocarles intoxicaciones graves.
2. Los bordes con rebaba y partes puntiagudas, sin lugar a dudas, provocarán heridas en los más pequeños de la casa, así como las astillas que resulten de su ruptura.
3. Verifique la edad recomendada del juguete, ya que para los más pequeños serán peligrosos los que se destinan a niños mayores.
4. Aunque crea que no es importante, los ruidos estridentes que puedan emitir algunos juguetes alteran a los niños y, lo peor: provocan problemas auditivos irreparables.
5. Las partes pequeñas que componen algunos juguetes o que se forman al romperse también son un peligro para los niños, pues si llegan a su boca pueden provocarles asfixia.
6. Compre en lugares bien establecidos en los que le den garantía, y guarde el ticket de compra para cualquier reclamación.

Precauciones importantes

+ Lea todas las leyendas y advertencias que estén en el cuerpo del producto y/o en el empaque antes de darle el juguete al niño.
+ Al abrir el empaque, deseche de inmediato las envolturas plásticas y demás empaques para que el niño no corra riesgo de asfixia.
+ Aleje de los más pequeños los juguetes para niños mayores.
+ Lea el instructivo para el mejor uso del producto y guarde las garantías para poder hacer válido lo que promete el proveedor.

Para cada niño, su juguete

Parte del cuidado al elegir un juguete, es tomar en cuenta que en cada etapa, las capacidades de los niños deben estimularse de diferente manera. Por eso, hay que darle el juguete adecuado de acuerdo con su edad, un dato que debe checar en el empaque del producto.

De 0 a 6 meses
Descubrir el mundo es su principal objetivo, y los juguetes que capten su atención y dejen desarrollar sus sentidos son los indicados.

De 6 meses a 1 año
El niño se mantiene sentado, puede gatear y hasta ponerse de pie. Su inquietud y curiosidad pueden satisfacerse con bloques de construcción, pelotas, juguetes con botones, aros, cubos, etc.

De 1 año a 1 año y medio
Los mejores juguetes son los que mejoran su capacidad motora, pues ya será capaz de caminar por lo que las andaderas y juguetes de arrastre son la opción correcta.

De 1 año y medio a 2 años
El niño comienza a decir sus primeras palabras, así que los rompecabezas sencillos, las muñecas y los cochecitos le permitirán estimular la interacción.

De 2 a 3 años
En esta edad la destreza manual y el equilibrio pueden apoyarse con plastilina, pinturas, construcciones de plástico o madera, rompecabezas e instrumentos musicales.
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miércoles, 24 de febrero de 2010

La Elección de la Guardería Infantil

Una de las tantas preocupaciones al tener niños y ser padres trabajadores es encontrar el lugar ideal para que sean cuidados o aún, educados. Así, una guardería o estancia o jardín de niños deben ser cuidadosamente analizados en favor de la tranquilidad tanto de los pequeños como de los mismos padres.
La Mtra. Ma. Guadalupe Serna Castillo tiene experiencia como educadora y coordinadora de jardínes de niños desde hace más de 20 años y comenta algunas de las premisas que deben considerarse en el momento de elegir el mejor lugar para el cuidado infantil.

1. La persona que reciba –ya sea directora o maestra--, sea de apariencia y trato agradable, de confianza en su hablar; esto es muy importante porque de la primera impresión, se forma una imagen y de ahí surge la tranquilidad para tomar la decisión de dejar o no a su hijo a su cuidado.
2. Conocer al personal docente, o en este caso la maestra que estará a cargo de su hijo, que tenga imagen alegre, que pueda transmitir confianza, pulcritud y un dinamismo al hablar y al mismo tiempo irradie dulzura amor y mucha paciencia, el factor más importante para estar frente a los niños.
3. Prestar atención a la apariencia del local, que tenga buena imagen a la vista y dé una sensación de frescura, que de primera impresión dé bienvenida al padre de familia.
4. Observar las aulas de trabajo, aseo de las mismas, orden de materiales y ver qué clase de material manejan.
5. Conocer las medidas de seguridad, solicitar plan de contingencia en caso de siniestro.
6. Analizar las instalaciones para darse una idea del ambiente en el que estará su hijo.
7. Ver que el plan de trabajo sea apropiado, que las normas del plantel se adapten a las necesidades del niño y sean de plena confianza para sus padres.
8. Entablar diálogos con el personal que labore en el plantel para evaluar el ambiente de armonía en que se desarrolla el trabajo diario.
9. Pero el punto más importante en la evaluación del plantel o guardería es la primera impresión, es el personal, su disponibilidad al recibir a los padres, en fin que puedan percibir un nivel de confianza, compromiso, respeto y amor de los responsables hacia su trabajo y por ende, hacia los niños.
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martes, 23 de febrero de 2010

Límites en la educación infantil

A veces es complicado saber la edad exacta a partir de la cual debemos empezar a enseñar reglas y modales a nuestros niños, sin embargo me parece que es necesario comenzar de a poco desde que son muy pequeños. Ciertamente un bebé no puede comprender que las 3 de la mañana no es una hora adecuada para cenar, pero tal vez en el momento que comienza a dar sus primeros pasos y es capaz de alcanzar objetos es que podemos iniciar el proceso de imponer límites. A nadie le gusta encontrarse con un niño haciendo un berrinche en el supermercado o gritando a todo pulmón en un restaurant o peor, pegando a sus padres y ellos celebrándolo. Bueno, tal vez no podamos hacer nada por ellos pero sí lo podemos hacer por nuestros hijos e incluso utilizar esas escenas poco agradables para hacerles ver un comportamiento inadecuado. Pueden ver un video genial en Youtube de una campaña publicitaria acerca de una manera efectiva y creativa para detener una rabieta en ciernes: http://www.youtube.com/watch?v=SkahzPzhXUk
Un artículo de un especialista que encontré en guiainfantil.com enlista una serie de acciones que pueden ayudar en la educación infantil.


Los niños necesitan límites. Cómo educar con disciplina a nuestros hijos

Conducta
Una disciplina eficaz a la hora de aplicar los límites a nuestros hijos es lo más importante. Si nosotros presentamos una buena regla, nuestro hijo estará dispuesto a cumplirla porque lo que quieren ellos es agradarnos. No nos encontramos preparados para establecer los límites. Nos falta habilidad para hacerlo. Hablamos demasiado, exageramos en la emoción, y en muchos casos, nos equivocamos en nuestra forma de expresar con claridad y con demasiada autoridad. Cuando necesitamos decir a nuestros hijos que deben hacer algo y "ahora" (recoger los juguetes, irse a la cama, etc.), debemos tener en cuenta algunos consejos básicos:

Debemos tener objetividad

Es frecuente oír de nosotros mismos y de otros padres expresiones como "Pórtate bien", "Sé bueno", o "no hagas eso" Las expresiones significan diferentes cosas para diferentes personas. Nuestros hijos nos entenderán mejor si hacemos nuestras normas de una forma más concreta. Un límite bien especificado dice a un niño exactamente lo que debe estar hecho. "Habla bajito en una biblioteca "; "Da de comer al perro ahora": "Agarra mi mano para cruzar la calle". Esta es una forma que puede aumentar substancialmente la relación de complicidad de su hijo.

Ofrezca opciones

En muchos casos podemos dar a nuestros hijos una oportunidad limitada de decidir como cumplir sus "órdenes". La libertad de oportunidad hace que un niño sienta una sensación de poder y control, reduciendo las resistencias. Por ejemplo: "Es la hora del baño. ¿Lo quieres tomar con la ducha o en la bañera llena?"; "Es la hora de vestirse. ¿Quieres elegir un traje, o lo hago yo? Esta es una forma más fácil y rápida de decir a un niño exactamente lo que hacer.

Sean firmes

En cuestiones realmente importantes, cuando existe una resistencia a la obediencia, nosotros necesitamos aplicar el límite con firmeza. Un límite firme dice a un niño que él debe parar con dicho comportamiento y obedecer a tus deseos inmediatamente. Por ejemplo: "Vayas a su habitación ahora" o "¡Pare!, los juguetes no son para tirar". Los límites firmes son mejor aplicados con una voz segura, sin gritos, y una seria mirada en el rostro. Los límites más suaves suponen que el niño tiene una opción de obedecer o no. Ejemplos de ligeros límites: "¿Porqué no lleva tus juguetes fuera de aquí?"; "Debes hacer las tareas de la escuela ahora"; " Venga a casa ahora, ¿vale?" e "Yo realmente deseo que te limpies". Esos límites son apropiados para momentos cuando se quiere que el niño actúe en un cierto camino. De cualquier modo, para esas pocas obligaciones "debe estar hecho", serás mejor cómplice de su hijo si les aplica un firme comando. La firmeza está entre lo ligero y lo autoritario.

Acentúa lo positivo

Los niños son más receptivos en "hacer" a lo que les ordenan. Directivas cómo el "no" o "pare" dicen a un niño que es inaceptable pero no explica qué comportamiento le gustaría en cambio. En general, es mejor decir a un niño lo que debe hacer ("Habla bajo") antes de lo que no debe hacer ("No grite"). Padres autoritarios dan más órdenes "no", mientras los demás están propensos a aplicar el orden con el "hacer".

Se mantengan al margen

Cuándo decimos "quiero que te vayas a la cama ahora mismo", estamos creando una lucha de poder personal con nuestros hijos. Una buena estrategia es hacer constar la regla de una forma impersonal. Por ejemplo: "Son las 8, hora de acostarse" y le enseña el reloj. En este caso, algunos conflictos y sentimientos estarán entre el niño y el reloj.

Explica el porqué

Cuando una persona entiende el motivo de una regla, como una forma de prevenir situaciones peligrosas para sí mismo y para otros, se sentirá mas animado a obedecerla. De este modo, lo mejor cuando se aplica un límite, es explicar al niño el porqué tiene que obedecer. Entendiendo la razón para el orden ayuda a los niños a que desarrollen valores internos de conducta o comportamiento- una conciencia. Antes de dar una larga explicación que puede distraer a los niños, manifieste la razón en pocas palabras. Por ejemplo: "No muerdas a las personas. Eso les hará daño"; "Si tiras los juguetes de otros niños, ellos se sentirán tristes porque les gustaría jugar aún con ellos".

Sugiera una alternativa

Siempre que apliques un límite al comportamiento de un niño, intente indicar una alternativa aceptable. Por hacerlo sonará menos negativo y su hijo se sentirá menos desaventajado. De este modo, te empeñas en decir "no sé si te gustaría mi pintalabios, pero eso es para los labios y no para jugar. Aquí tienes un lápiz y papel en cambio". Otro ejemplo sería decir "No te puedo dar un caramelo antes de la cena, pero te puedo dar un helado de chocolate después". Por ofrecerle alternativas, le estás enseñando que sus sentimientos y deseos son aceptables. Este es un camino de expresión más correcto.

Sea seriamente consistente

Una regla puntual para una efectiva puesta del límite es evitar una regla repetitiva. Una rutina flexible (acostarse a las 8 una noche, a las 8 y media en la próxima, y a las 9 en otra noche) invita a una resistencia y se torna imposible de cumplir. Rutinas y reglas importantes en la familia deberían ser efectivas día tras día, aunque estés cansado o indispuesto. Si das a tu hijo la oportunidad de dar vueltas a sus reglas, ellos seguramente intentarán resistir.

Desaprueba la conducta, no el niño

Es necesario que dejemos claro para nuestros hijos que nuestra desaprobación está relacionada a su comportamiento y no directamente a ellos. No les estamos rechazando. Lejos de decir "Niño malo" (desaprobación del niño). Deberíamos decir "No muerdas" (desaprobación de la conducta). En lugar de decir "realmente no puedo controlarte cuando actúas de esta forma", deberíamos decir, "Estas latas no están para tirar. Deben quedar en el estante del almacén".

Controla las emociones

Los investigadores señalan que cuando los padres están muy enojados castigan más seriamente y son más propensos a ser verbalmente y/o físicamente abusivos a sus niños. Hay épocas en que necesitamos llevar con más calma, y contar hasta diez antes de reaccionar. La disciplina es básicamente enseñar al niño cómo debe comportarse. No se puede enseñar con eficacia si usted es extremamente emocional. Delante de un mal comportamiento, lo mejor es llevar un minuto de calma uno mismo, y después preguntar con calma, "¿que sucedió aquí?". Todos los niños necesitan que sus padres establezcan las guías de consulta para el comportamiento aceptable. Cuanto más expertos hacemos en fijar los límites, mayor es la cooperación que recibiremos de nuestros niños y menor la necesidad de aplicar consecuencias desagradables para que se cumplan los límites. El resultado es una atmósfera casera más agradable para los padres y los hijos.

(Autor: Charles E. Schaefer, Ph.D., es un profesor de psicologÍa y director del Centro de Servicios Psicológicos en la Universidad de Fairleigh Dickinson. Es autor de más de 40 libros, incluyendo "Teach your child to behave disciplining with love from 2 to 8 years".)



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domingo, 21 de febrero de 2010

Hogar Seguro

Entre la cantidad infinita de información que podemos encontrar en internet, me topé con un artículo muy práctico acerca de la seguridad infantil en el hogar. Hay muchos puntos que ya conocemos y otros que tal vez olvidamos, así que no está de más recordarlos.


¡A prueba de bebés!

Tips para un hogar seguro


Getty Images
Pon rejas al pie y al inicio de tus escaleras.
María Elena Venant, Univision.com

Un bebé causa gran felicidad, pero también afecta la vida de una pareja y la rutina hogareña. El bienestar de un niño es la prioridad de sus padres. Por eso, nada mejor que evitar accidentes impensados antes del arribo de una nueva adicción familiar. Tanto los bebés de cunas como los que gatean, caminan, o los que ya ha entrado a la peligrosa etapa de toddlers, están en riesgo dentro lo que hasta ahora parecía una casa segura. Aquí te damos algunos tips para que tengas un hogar “baby proof”.

Prevén accidentes domésticos

Lo primero que debes pensar es que tu casa alberga objetos aparentemente inofensivos, pero que en manos de una criatura pueden convertirse en amas mortales. Todo lo que pueda quebrarse, cortar o aplastar es un peligro. Al igual que todo lo que el niño pueda tragar. Los accidentes domésticos son la mayor causa de visitas infantiles a la Sala de Urgencias en USA. El 70'% de esos niños, de menos de 4 años, muere a causa de heridas accidentales contraídas en el hogar.

De acuerdo al CDC (Center for Control of Diseases and Prevention) la mayor parte de esos accidentes están relacionados con agua (piscinas o tinas de baño); fuego (estufas y hornos); caídas (escaleras, ventanas) y sustancias toxicas (medicinas, productos de limpieza etc.) Como dice Abby Retana, medico del Advocate's Bethany Hospital en Chicago, "la mayoría de esos accidentes se hubiesen evitado si los padres hubiesen recorrido sus hogares buscado punto problemáticos”.


¡Cuidado Con la electricidad!
No hay nada más atractivo para los deditos infantiles que agujeritos como los de los enchufes. Asegúrate que todos tengan protectores plásticos. Vigila los cables en los que se pueda tu hijo tropezar o arrastrar algún artefacto eléctrico que le caiga encima. En lo posible, mantén algunos aparatos (licuadoras, tostadoras y calentadores de agua) desenchufados, si no los estás usando. Recuerda enrollar y esconder cordones y alargadores, o usa cables retractiles.


Ten todas tus unidades, tanto de entretención o computación, bien seguras, pegadas o clavadas a la pared. Aplica el mismo criterio con los implementos eléctricos de la cocina. No mantengas aparatos eléctricos como secadoras u onduladores de cabello en el baño. Ten las maquinas de afeitar bien guardadas en cajas que tu bebé no pueda abrir.

El Home Safety Council, una organización dedicada a prevenir accidentes domésticos, aconseja instalar en el baño un GFCI (Ground Fault Circuit Interruptor) que los protegerá a ti y a los tuyos en caso que el agua y a electricidad entren en contacto. También un regulador de temperatura del agua es aconsejable para evitar quemaduras.

Un mundo tóxico
Los bebés aprenden, conocen y prueban todo con dos sentidos, tacto y gusto. Todo se lo llevan a la boca. Debes vigilar tu medioambiente para prevenir envenenamientos y sofocación causada por objetos atrapados en la garganta. Cosas aparentemente inofensivas como cosméticos, desodorantes, jabones, incluso un rollo de papel higiénico, pueden convertirse en un banquete letal para tu hijo. Guarda todo en lugares altos, lejos de su alcance.

No dejes el costurero o el joyero cerca del niño. Un botón, un arete, cualquier objeto que mida menos de tres centímetros puede asfixiarlo si se lo traga. Pon las plantas en lugares altos para que no las muerda. Ten cuidado con papel mural que se desprenda fácilmente o pintura descascarada que es muy tóxica, pero también muy apetitosa para los pequeños.

Ese loco impulso de arrastrar
En los niños, aun los bebitos, existe el impulso de tomar las cosas, de tocar y de arrastrar. Tal como mantienes los cables eléctricos lejos de tus hijos, preocúpate de que no haya objetos colgantes cerca de ellos. Si la cuna está cerca de la ventana, revisa que los hilos de persianas y cortinas no estén al alcance de las manitos del niño. Apenas el bebé ya pueda pararse, debes retirar de su camita todo lo colgante: móviles, listones, mosquiteros, etc.

Cambia tus manteles largos por individuales para que tus niños, ya en edad de gatear, no se cuelguen de los bordes. Haz lo mismo con las toallas de baño que al caerles encima puedan sofocarlos. Nunca dejes bolsas plásticas, de ningún tamaño, al alcance de un niño pequeño.

En la cocina, recuerda siempre tener los mango de sartenes y ollas hacia adentro, lejos del alcance de tus hijos. Por regla general, ni niños pequeños ni mascotas deberían entrar a la cocina cuando tengas cosas en el fuego o estés cocinando.

La curiosidad mató al
gato.

Después del gato, no hay criatura más curiosa en el universo que un bebé que comienza a movilizarse de manera independiente. Tus mejores amigos serán los candados y llaves con los que cerrarás tus gabinetes, especialmente donde guardes medicamentos, artículos de limpieza, y objetos punzantes. Es buena idea también ponerle un seguro a la tapa del inodoro para evitar que el niño pueda caer adentro y ahogarse.

Hoy en día, se pueden colocar seguros en puertas de horno, lavadoras y refrigeradores. Aprovéchalos. Que tu contenedor de basura tenga tapa y que no se pueda abrir fácilmente. Todo lo que sea de vidrio, o que pueda quebrarse, debe ponerse en estantes altos y firmes que el niño no pueda sacudir ni voltear. Evita las lámparas de pie y los maceteros a nivel del piso.

Espacios "acolchados"
Desde el momento en que tu hijo comience a gatear debes “acolcharle” el mundo. Hay cubiertas en el mercado en forma de animalitos para tapar las llaves de baño y evitar cabezazos. Cubre el piso de tu tina con una alfombra plástica adhesiva. Protege las esquinas de tus muebles con algún material amortiguador. Un amortiguador en la puerta pude evitar que se cierre violentamente golpeando al niño.

Alfombra tus escaleras y pon una rejilla para que los niños no se caigan. Coloca barreras de seguridad al pie y al inicio de los escalones. También es aconsejable poner protecciones en las ventanas.

Cunas peligrosas
Invierte tiempo y dinero en la primera cama de tu bebé. Antes que su apariencia, la seguridad debe ser tu prioridad. Asegúrate que reúna las garantías necesarias y que pase las pruebas de calidad. Evita cunas pintadas, ya que la mayoría de las pinturas contienen plomo. Que los barrotes sean estrechos (que no quepa una lata de soda entremedio) y que entre el colchón y barrotes no quepa más que un dedo.

Nunca pongas la cuna cerca de una ventana abierta o de un muble o estante cargados de juguetes. Si el niño ya puede pararse también puede voltearlos. Si dejas al niño durmiendo y solo, ponlo de espaldas y retira de la cuna frazadas, almohadas y juguetes.

“Mantener a sus hijos a salvo es la prioridad de todos los padres y comienza antes que nazca el bebe”, dice Meri-K Abby, Presidenta del Home Safety Council. “Crear un hogar seguro para su pequeñito no tiene que tomar mucho tiempo ni costar mucho dinero”.
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viernes, 19 de febrero de 2010

La Seguridad Infantil 24x7

¿De qué se trata esto de hablar de Seguridad Infantil 24x7? Justamente de eso, de lograr que nuestros niños esten seguros las 24 horas los 7 días de la semana. Pero entonces se trata de que los papás deban estar pendientes de ellos todo el tiempo? sin oportunidad de tiempo para ellos mismos? No necesariamente, hay una serie de acciones y dispositivos que ayudan a la tarea de los papas para que la seguridad esté presente día y noche en nuestro hogar, nuestro vehículo, patio o jardín de niños.
Éste es el objetivo del presente blog, ofrecer artículos relacionados con la salud integral de nuestros pequeños con el fin de que los adultos podamos encontrar alternativas investigadas, creativas, seguras y a la vez sencillas que hagan de nuestros hogares espacios de descanso --bueno, por decirlo de una manera, pues teniendo pequeños en casa el descanso se entiende de forma distinta--, de tranquilidad, al saber que hacemos nuestro mejor esfuerzo por cuidarlos y protegerlos, incluso de ellos mismos.
Ser padre no es fácil y no hay un manual (empiezo a pensar que alguien debería cubrir esa necesidad), sin embargo sí existen una infinidad de revistas y libros hechos por especialistas y estudiosos del tema.
No vamos a crear una nueva ciencia o técnica parental, pero sí vamos a ofrecer un compendio con los mejores estudios y artículos de los conocedores del tema y así, con tus comentarios y sugerencias será enriquecido y dinámico para el beneficio de todos.
¡Bienvenidos!
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